Con la ortodoncia invisible, como es el caso de Invisalign, puede quitarse las férulas siempre que quiera: cenas con amigos, reuniones, actos sociales…
De momento, su único inconveniente es el precio, pues la ortodoncia invisible resulta algo más caro que otros tipos de ortodoncia.
El tener los dientes torcidos en muchas ocasiones afecta a la apariencia de la persona. Los tratamientos de ortodoncia pueden solucionar estos problemas, pero en algunos de ellos no son discretos.
La ortodoncia invisible es una clara alternativa al tratamiento de ortodoncia convencional con el que se pueden resolver los problemas mencionados anteriormente y muchos más, sin la necesidad de recurrir a los anti-estéticos brackets metálicos.