El tratamiento Invisalign, también conocido como la ortodoncia invisible, es uno de los procedimientos más utilizados en la actualidad para la alineación dental y la corrección de las maloclusiones. En nuestra clínica dental de Valdemoro conocemos bien su eficacia y también las mínimas molestias que tienen los pacientes en relación a otros tratamientos de ortodoncia más tradicionales.
Para que conozcas a fondo la ortodoncia invisible Invisalign, te contamos en este artículo sus siete principales ventajas:
Un tratamiento 100% Estético
Una vez que inicies tu tratamiento, te iremos proporcionando unas fundas transparentes (alineador o aligner) que irás cambiando cada 7 días aproximadamente. A medida que vayas cambiando de alineador, tus dientes se irán colocando. Con Invisalign® nadie se dará cuenta de que estás haciendo un tratamiento de ortodoncia.
Es Removible
Los pacientes que se deciden por este sistema, pueden decidir cuándo ponerse y cuándo quitarse su aparato. Aún así, es importante destacar que, para que los alineadores hagan el efecto deseado, es necesario respetar las indicaciones de uso del ortodoncista: llevarlo durante unas 22 horas al día.
Cómodo para el paciente
Además de que los alineadores son transparentes, podrás quitártelos en cada comida, ya que Invisalign® te permite comer cualquier tipo de alimento. Sólo deberás quitarte los alineadores, comer, lavarte los dientes y volvértelos a poner.
No interfiere apenas con el habla ni con las comidas
Invisalign® se adapta perfectamente a tus dientes y es mucho menos visible que cualquier otro tipo de ortodoncia. Gracias esto, te adaptarás mucho más rápido a llevar los alineadores.
Ideal para personas con alergias a metales
Al contrario de lo que ocurre con los brackets fijos, con Invisalign® no tendrás que preocuparte por la irritación, heridas y molestias provocadas por las partes metálicas. La ausencia de metal o bordes afilados hace que Invisalign® sea cómodo de llevar y que no provoque alergias.
Permite una perfecta higiene oral
La técnica Invisalign, permite que tengas una higiene dental igual o mejor a la que tenías antes de iniciar tu tratamiento, sin tener que preocuparte por los obstáculos que suponen los brackets y alambres.
Mínimas urgencias
Con la ortodoncia Invisalign reducirás tus visitas a la clínica, ya que eres tú misma quien puede sustituir los alineadores según las indicaciones de tú ortodoncista. Cada seis u ocho semanas deberás acudir a la clínica para revisión del tratamiento en una consulta que suele durar unos veinte minutos.